Los tratamientos de aguas con membranas son una medida eficaz para eliminar sustancias no deseadas en el agua. Las membranas son barreras que se encargan de filtrar sales o iones, virus, impurezas y otros componentes.
Un proceso de membrana es cualquier método que se basa en una barrera de membrana para filtrar o eliminar partículas del agua. En este procedimiento el fluido pasa a través de la membrana gracias a la diferencia de presión entre un lado de la membrana y el otro, dejando a un lado los contaminantes.
Aunque se utilizan muchos tipos de medios de filtración para el tratamiento del agua como arcilla, limo y arena, una de las propiedades que distingue a las membranas es su capacidad para separar las sustancias más pequeñas como sales e iones.
Gracias a los avances en el diseño y fabricación de estos componentes, se ha conseguido que cada vez tengan mayores flujos de permeado que se producen a menores presiones de operación.
Existen varios tipos de membranas en función del tamaño de sus poros y de las sustancias a las que permiten o no el paso. Uno de ellos es la ultrafiltración.
¿Qué es la ultrafiltración?
La ultrafiltración es uno de los tipos de procesos de separación con membranas para tratamientos de agua. Permite separar sólidos suspendidos o disueltos utilizando una presión que actúa como fuerza impulsora para forzar el paso del agua a través de una membrana semipermeable.
Dentro de los tipos de tratamiento de aguas con membrana, la ultrafiltración utiliza unos poros un poco más grandes que los de la nanofiltración. Su tamaño oscila entre los 0.1 y los 0.01 micrones.
Las membranas requieren de una limpieza y un mantenimiento para evitar la suciedad con sólidos o agentes microbiológicos como microbios y algas. Además, en este proceso la presión que actúa como fuerza impulsora es relativamente baja.
En este tipo de tratamiento se permite el paso de sales, azúcares, ácidos orgánicos y se deja fuera a las proteínas, las grasas y los polisacáridos.
Los sistemas de ultrafiltración son de alta eficiencia y muy utilizados en plantas de reutilización de aguas residuales urbanas e industriales, como pretratamiento en procesos de ósmosis inversa para el sector industrial y para plantas compactas de potabilización.
Aplicaciones de la ultrafiltración
Dentro de los tratamientos de filtración de agua por membranas, la ultrafiltración es de gran utilidad en:
- La eliminación de partículas y macromoléculas en la producción de agua potable.
- En el tratamiento y el reciclaje de efluentes y agua de procesos industriales.
- En sistemas autónomos de filtración y tratamiento de aguas
- En la industria alimentaria o de bebidas.
- En las plantas de tratamiento de agua existentes, aumentando o sustituyendo las etapas de filtración secundaria y terciaria.
Ventajas de la ultrafiltración
- Mayor cantidad de trabajo en un 50% menos de espacio respecto a la filtración convencional gracias a que las plantas son muy compactas.
- Prolonga la vida útil de las membranas de ósmosis inversa en el tratamiento de aguas..
- Menor inversión, costos de operación reducidos.
- No utiliza coagulantes y requiere poco uso de productos químicos.
- Funcionan a temperatura ambiente de manera continuada.
- La membrana permite una gran eficiencia en la separación.
- Es una técnica fácil de combinar con otros procesos.
SETA PH Technology trabaja con membranas de calidad y conoce cuál es la más adecuada para cada caso. Sus sistemas de ultrafiltración también cuentan con su propio sistema de limpieza automático de eficacia probada.
